Presentación de nalgas⁚ tipos, factores de riesgo, tratamiento y complicaciones

La presentación de nalgas se refiere a la posición del feto en el útero durante el embarazo, donde las nalgas o los pies del bebé se encuentran en la parte inferior del canal de parto, en lugar de la cabeza.

Introducción

La presentación de nalgas es una condición obstétrica que ocurre cuando el feto se posiciona en el útero con las nalgas o los pies en la parte inferior del canal de parto, en lugar de la cabeza. Esta presentación se presenta en aproximadamente del 3 al 4% de los embarazos a término, y puede tener implicaciones importantes para el parto y la salud del bebé.

La presentación de nalgas puede ser causada por una variedad de factores, incluyendo la edad materna, la prematurez, el embarazo múltiple, las malformaciones fetales y otras complicaciones del embarazo. El diagnóstico de la presentación de nalgas se realiza mediante un examen pélvico y un ultrasonido.

El tratamiento de la presentación de nalgas depende de varios factores, incluyendo la edad gestacional, la posición del feto y la salud del bebé. Se pueden considerar opciones como la versión cefálica externa, la inducción del trabajo de parto o la cesárea.

La presentación de nalgas puede conllevar riesgos tanto para la madre como para el bebé, incluyendo distocia de hombros, prolapso del cordón umbilical, distrés fetal y aspiración de meconio. Es importante que las mujeres embarazadas con presentación de nalgas reciban atención médica especializada para garantizar un parto seguro y saludable.

Definición de presentación de nalgas

La presentación de nalgas se define como la posición del feto en el útero durante el embarazo, donde las nalgas o los pies del bebé se encuentran en la parte inferior del canal de parto, en lugar de la cabeza. En otras palabras, el feto se presenta con la cabeza hacia arriba, mientras que la pelvis se encuentra en la posición más baja.

Esta presentación se considera anormal, ya que la cabeza del feto es la parte más grande y está diseñada para descender primero a través del canal de parto. La presentación de nalgas puede ser un signo de una variedad de problemas, incluyendo prematurez, malformaciones fetales o complicaciones del embarazo.

Es importante destacar que la presentación de nalgas no siempre es un signo de peligro, y en algunos casos, puede ser una presentación normal, especialmente en los primeros meses del embarazo. Sin embargo, a medida que el embarazo avanza, la presentación de nalgas se vuelve más preocupante, ya que puede aumentar el riesgo de complicaciones durante el parto.

Tipos de presentación de nalgas

La presentación de nalgas se clasifica en tres tipos principales, dependiendo de la posición de las piernas y los pies del feto⁚

• Presentación de nalgas completa⁚ En este tipo, las piernas del feto están flexionadas y los pies están cerca de las nalgas.
• Presentación de nalgas incompleta⁚ En este tipo, una o ambas piernas del feto están extendidas hacia abajo, con los pies por debajo de las nalgas.
• Presentación de nalgas de pies⁚ En este tipo, ambas piernas del feto están extendidas hacia abajo, con los pies primero.

La presentación de nalgas completa es la más común, seguida de la incompleta. La presentación de nalgas de pies es la menos frecuente.

El tipo de presentación de nalgas puede influir en las opciones de parto y en el riesgo de complicaciones.

Presentación de nalgas completa

La presentación de nalgas completa, también conocida como presentación de nalgas flexionadas, es la más común de los tres tipos de presentación de nalgas. En esta presentación, las piernas del feto están flexionadas en las caderas y las rodillas, con los pies cerca de las nalgas; El feto se presenta con las nalgas primero, seguido de los pies y las piernas.

La presentación de nalgas completa se considera generalmente la más favorable para el parto vaginal, ya que las nalgas del feto son más grandes que los pies y pueden ayudar a dilatar el cuello uterino. Sin embargo, todavía existe un riesgo mayor de complicaciones, como la distocia de hombros, el prolapso del cordón umbilical y el distrés fetal, en comparación con la presentación cefálica.

La posición del feto en la presentación de nalgas completa puede variar, y puede ser necesario realizar un examen pélvico o una ecografía para determinar la posición exacta.

Presentación de nalgas incompleta

La presentación de nalgas incompleta, también conocida como presentación de nalgas extendidas, es menos común que la presentación de nalgas completa. En este tipo de presentación, una o ambas piernas del feto están extendidas, con el pie o los pies hacia abajo, mientras que las nalgas están en la parte inferior del útero.

La presentación de nalgas incompleta se considera más riesgosa para el parto vaginal que la presentación de nalgas completa, ya que las piernas extendidas pueden dificultar el descenso del feto a través del canal de parto. Además, el riesgo de prolapso del cordón umbilical aumenta con la presentación de nalgas incompleta, ya que las piernas del feto pueden presionar el cordón umbilical contra el cuello uterino.

El tratamiento de la presentación de nalgas incompleta puede variar según el caso individual, pero la cesárea es a menudo la opción preferida para garantizar la seguridad tanto de la madre como del bebé.

Presentación de nalgas de pies

La presentación de nalgas de pies es la menos común de las presentaciones de nalgas. En este tipo, los pies del feto se encuentran en la parte inferior del útero, con las piernas dobladas hacia arriba. Esta presentación se considera la más riesgosa para el parto vaginal, ya que los pies son más pequeños que las nalgas y pueden no ser lo suficientemente grandes para estimular la dilatación del cuello uterino.

La presentación de nalgas de pies también aumenta el riesgo de prolapso del cordón umbilical, ya que los pies del feto pueden presionar el cordón umbilical contra el cuello uterino. Además, el riesgo de distocia de hombros, una complicación que ocurre cuando los hombros del bebé no pueden pasar a través del canal de parto, es mayor con la presentación de nalgas de pies.

En la mayoría de los casos, la cesárea es la opción preferida para la presentación de nalgas de pies, ya que reduce el riesgo de complicaciones para la madre y el bebé.

Factores de riesgo para la presentación de nalgas

La presentación de nalgas es una condición que puede estar relacionada con una serie de factores, algunos de los cuales son modificables y otros no. Es importante identificar estos factores de riesgo para poder tomar medidas preventivas y ofrecer un manejo adecuado durante el embarazo y el parto.

Entre los factores de riesgo más comunes se encuentran⁚

• Edad materna⁚ Las mujeres mayores de 35 años tienen un mayor riesgo de tener un bebé en presentación de nalgas.
• Embarazo múltiple⁚ Los embarazos gemelares o de múltiples fetos también aumentan la probabilidad de presentación de nalgas.
• Prematurez⁚ Los bebés que nacen antes de las 37 semanas de gestación tienen un mayor riesgo de presentación de nalgas.
• Bajo peso al nacer⁚ Los bebés con bajo peso al nacer también tienen un mayor riesgo de presentación de nalgas.
• Malformaciones fetales⁚ Algunas malformaciones fetales, como la anencefalia, pueden dificultar la posición del bebé en el útero y aumentar el riesgo de presentación de nalgas.
• Placenta previa⁚ La placenta previa, una condición en la que la placenta se ubica en la parte baja del útero, puede interferir con el movimiento del bebé y aumentar el riesgo de presentación de nalgas.
• Prolapso del cordón umbilical⁚ El prolapso del cordón umbilical, una condición en la que el cordón umbilical sale antes que la cabeza del bebé, es más común en los bebés en presentación de nalgas;
• Otras complicaciones del embarazo⁚ Otras complicaciones del embarazo, como la polihidramnios (exceso de líquido amniótico) o la oligohidramnios (deficiencia de líquido amniótico), también pueden aumentar el riesgo de presentación de nalgas.

Edad materna

La edad materna es un factor de riesgo significativo para la presentación de nalgas. Las mujeres mayores de 35 años tienen una mayor probabilidad de tener un bebé en presentación de nalgas en comparación con las mujeres más jóvenes. Este aumento en el riesgo se debe a varios factores relacionados con la edad, incluyendo⁚

• Cambios en el útero⁚ Con el paso de los años, el útero puede perder algo de su elasticidad y tono muscular, lo que puede dificultar que el bebé se posicione correctamente en la pelvis.
• Mayor probabilidad de embarazos múltiples⁚ Las mujeres mayores tienen una mayor probabilidad de tener embarazos gemelares o de múltiples fetos, lo que aumenta el riesgo de presentación de nalgas.
• Mayor probabilidad de complicaciones del embarazo⁚ Las mujeres mayores también tienen una mayor probabilidad de experimentar otras complicaciones del embarazo, como la placenta previa o el prolapso del cordón umbilical, que también pueden aumentar el riesgo de presentación de nalgas.

Si bien la edad materna es un factor de riesgo, es importante destacar que la mayoría de las mujeres mayores de 35 años tienen bebés en presentación cefálica. La presentación de nalgas en mujeres mayores es más común, pero aún es relativamente poco frecuente.

Embarazo múltiple

Los embarazos múltiples, como los gemelos o los trillizos, representan un factor de riesgo significativo para la presentación de nalgas. En estos casos, la cantidad limitada de espacio en el útero dificulta que los bebés se posicionen correctamente.

• Menor espacio⁚ El útero se adapta al crecimiento de los fetos, pero en embarazos múltiples, el espacio disponible es menor para que los bebés se acomoden en posición cefálica.
• Mayor probabilidad de prematurez⁚ Los embarazos múltiples tienen un mayor riesgo de parto prematuro, y los bebés prematuros tienen una mayor probabilidad de presentar nalgas.
• Mayor probabilidad de malformaciones fetales⁚ Los embarazos múltiples también tienen un mayor riesgo de malformaciones fetales, que pueden contribuir a la presentación de nalgas.

La presentación de nalgas es más común en embarazos múltiples, y es crucial que las mujeres embarazadas con gemelos o más fetos reciban un seguimiento y una atención prenatal adecuados para identificar y gestionar este riesgo.

Prematurez

La prematurez, definida como el nacimiento antes de las 37 semanas de gestación, es un factor de riesgo importante para la presentación de nalgas. Los bebés prematuros, especialmente aquellos nacidos antes de las 32 semanas, tienen un mayor riesgo de presentar nalgas debido a su menor desarrollo muscular y esquelético.

• Menor desarrollo muscular⁚ Los bebés prematuros tienen músculos menos desarrollados, lo que les dificulta la capacidad de girar y posicionarse correctamente en el útero.
• Menor desarrollo esquelético⁚ Los huesos de los bebés prematuros también están menos desarrollados, lo que les dificulta la capacidad de girar y posicionarse en posición cefálica.
• Mayor movilidad⁚ Los bebés prematuros tienen una mayor movilidad en el útero, lo que aumenta la posibilidad de que se posicionen en presentación de nalgas.

La prematurez es un factor de riesgo complejo que puede contribuir a la presentación de nalgas, y es esencial que las mujeres embarazadas con riesgo de parto prematuro reciban una atención prenatal adecuada para detectar y gestionar este riesgo.

Bajo peso al nacer

El bajo peso al nacer, definido como un peso al nacer inferior a 2.500 gramos, también se asocia con un mayor riesgo de presentación de nalgas. Los bebés con bajo peso al nacer pueden tener dificultades para girar y posicionarse correctamente en el útero debido a su menor tamaño y desarrollo muscular.

• Menor tamaño⁚ Los bebés con bajo peso al nacer son más pequeños y pueden tener menos espacio para moverse y girar en el útero.
• Menor desarrollo muscular⁚ Los bebés con bajo peso al nacer pueden tener músculos menos desarrollados, lo que les dificulta la capacidad de girar y posicionarse en posición cefálica.
• Mayor riesgo de complicaciones⁚ Los bebés con bajo peso al nacer también tienen un mayor riesgo de otras complicaciones, como la prematurez, que también se asocia con la presentación de nalgas.

Es fundamental que las mujeres embarazadas con riesgo de tener un bebé con bajo peso al nacer reciban una atención prenatal adecuada para detectar y gestionar este riesgo, y para minimizar la posibilidad de presentación de nalgas.

Malformaciones fetales

Ciertas malformaciones fetales pueden dificultar que el bebé se posicione en posición cefálica, aumentando el riesgo de presentación de nalgas. Estas malformaciones pueden afectar la movilidad del bebé en el útero o incluso restringir el espacio disponible para que el bebé gire.

• Malformaciones de las extremidades⁚ Anomalías en las piernas o los brazos pueden impedir que el bebé se mueva y se posicione correctamente.
• Malformaciones del sistema nervioso central⁚ Algunas malformaciones del cerebro o la médula espinal pueden afectar la capacidad del bebé para controlar sus movimientos.
• Malformaciones de la columna vertebral⁚ Anomalías en la columna vertebral, como la espina bífida, pueden dificultar la movilidad del bebé.
• Malformaciones genéticas⁚ Ciertas enfermedades genéticas pueden aumentar el riesgo de presentar malformaciones que pueden asociarse con la presentación de nalgas.

La detección temprana de malformaciones fetales es crucial para la planificación del parto y la gestión de la presentación de nalgas.

Placenta previa

La placenta previa es una condición en la que la placenta se implanta en la parte inferior del útero, cubriendo parcial o totalmente el cuello uterino. Esta situación puede dificultar el descenso del bebé por el canal de parto, aumentando el riesgo de presentación de nalgas.

• Restricción del espacio⁚ La placenta previa puede ocupar espacio en la parte inferior del útero, dejando menos espacio para que el bebé se mueva y se posicione en posición cefálica.
• Sangrado⁚ El sangrado vaginal durante el embarazo es un síntoma común de placenta previa. Este sangrado puede provocar un parto prematuro o un nacimiento prematuro, lo que aumenta el riesgo de presentación de nalgas.
• Riesgo de parto por cesárea⁚ La placenta previa suele requerir un parto por cesárea para evitar complicaciones durante el parto vaginal.

El diagnóstico temprano de la placenta previa es crucial para la planificación del parto y la gestión de la presentación de nalgas.

Prolapso del cordón umbilical

El prolapso del cordón umbilical ocurre cuando el cordón umbilical se desliza por delante del bebé y entra en el canal de parto antes que la cabeza del feto. Esta situación puede comprimir el cordón umbilical, reduciendo el flujo sanguíneo al bebé y provocando un distrés fetal.

• Presentación de nalgas⁚ La presentación de nalgas aumenta el riesgo de prolapso del cordón umbilical porque la cabeza del bebé no está presente para bloquear el canal de parto y evitar que el cordón se desplace.
• Prematurez⁚ Los bebés prematuros tienen un mayor riesgo de prolapso del cordón umbilical debido a que su cabeza es más pequeña y puede no sellar completamente el canal de parto.
• Poca cantidad de líquido amniótico⁚ La falta de líquido amniótico puede aumentar el riesgo de prolapso del cordón umbilical al no proporcionar un amortiguador para el cordón.

El prolapso del cordón umbilical es una emergencia médica que requiere atención inmediata.

Otras complicaciones del embarazo

Además de las mencionadas anteriormente, otras complicaciones del embarazo pueden aumentar el riesgo de presentación de nalgas. Estas incluyen⁚

• Placenta previa⁚ La placenta previa ocurre cuando la placenta se implanta en la parte inferior del útero, cubriendo parcial o totalmente el cuello uterino. Esto puede dificultar el descenso del bebé a través del canal de parto y aumentar el riesgo de presentación de nalgas.
• Miomas uterinos⁚ Los miomas uterinos son tumores benignos que pueden crecer en el útero. Si los miomas son grandes o se encuentran en la parte inferior del útero, pueden interferir con el descenso del bebé y aumentar el riesgo de presentación de nalgas.
• Malformaciones uterinas⁚ Las malformaciones uterinas, como un útero bicorne o un útero septato, pueden afectar la posición del bebé en el útero y aumentar el riesgo de presentación de nalgas.

Es importante que las mujeres embarazadas con estas complicaciones sean controladas de cerca por su médico para minimizar el riesgo de presentación de nalgas.

Diagnóstico de la presentación de nalgas

El diagnóstico de la presentación de nalgas se realiza generalmente durante las visitas de control prenatal. El médico puede determinar la posición del bebé mediante un examen pélvico y una ecografía.

Examen pélvico

Durante el examen pélvico, el médico palpa el abdomen de la embarazada para identificar la posición de la cabeza y los pies del bebé. Sin embargo, este método no siempre es preciso, especialmente en las primeras etapas del embarazo.

Ultrasonido

La ecografía es la técnica más precisa para determinar la posición del bebé. Se realiza mediante ondas sonoras que crean una imagen del bebé en el útero. La ecografía permite visualizar la posición de la cabeza, los pies y la placenta, lo que facilita el diagnóstico de la presentación de nalgas.

Es importante realizar un seguimiento regular con el médico durante el embarazo para identificar la presentación de nalgas y tomar las medidas necesarias para garantizar un parto seguro.

Examen pélvico

El examen pélvico es una parte integral del control prenatal y se realiza para evaluar la salud del embarazo y el bienestar del feto. Durante el examen, el médico utiliza sus manos para palpar el abdomen de la embarazada. Este procedimiento, conocido como palpación abdominal, permite al médico determinar la posición del feto, incluyendo la presentación de la cabeza o las nalgas.

La palpación abdominal se basa en la identificación de las diferentes partes del feto a través del tacto. El médico busca la cabeza, los pies y el dorso del bebé. Si la cabeza del bebé se encuentra en la parte inferior del útero, se considera una presentación cefálica. Por el contrario, si se palpan las nalgas o los pies en la parte inferior, se diagnostica una presentación de nalgas.

Es importante destacar que el examen pélvico no siempre es concluyente para determinar la presentación del feto. En algunos casos, la posición del bebé puede ser difícil de determinar con precisión mediante la palpación abdominal. En estos casos, se requiere la realización de una ecografía para confirmar el diagnóstico.

Ultrasonido

La ecografía es una herramienta de diagnóstico por imagen que utiliza ondas sonoras para crear imágenes del interior del cuerpo. En el contexto del embarazo, la ecografía juega un papel fundamental en la detección de la presentación de nalgas y en la evaluación del desarrollo fetal.

Durante la ecografía, se utiliza un transductor que emite ondas sonoras que atraviesan los tejidos del cuerpo. Las ondas sonoras rebotan en las diferentes estructuras del cuerpo y son captadas por el transductor. La información recopilada se utiliza para generar una imagen en tiempo real del feto en el útero.

La ecografía permite visualizar la posición del feto en el útero, incluyendo la presentación de la cabeza o las nalgas. Además, la ecografía proporciona información valiosa sobre el tamaño del feto, la cantidad de líquido amniótico y la ubicación de la placenta. Esta información es crucial para determinar el mejor curso de acción para el parto, ya sea un parto vaginal o una cesárea.

Tratamiento de la presentación de nalgas

El tratamiento de la presentación de nalgas depende de varios factores, incluyendo la edad gestacional, la posición del feto, la salud materna y fetal, y las preferencias de la paciente. Las opciones de tratamiento incluyen⁚

• Versión cefálica externa (VCE)⁚ Se trata de una maniobra manual realizada por un médico para girar al feto desde una presentación de nalgas a una presentación cefálica. La VCE se realiza generalmente entre las semanas 36 y 37 de gestación y tiene un mayor éxito en los embarazos de bajo riesgo.
• Inducción del trabajo de parto⁚ En algunos casos, se puede inducir el trabajo de parto en una mujer con presentación de nalgas. La inducción del trabajo de parto se realiza generalmente cuando el feto está a término y la madre y el feto están sanos.
• Cesárea⁚ La cesárea es la opción de parto más común para las mujeres con presentación de nalgas. Se recomienda una cesárea en casos de riesgo de complicaciones para la madre o el feto, como un feto con bajo peso al nacer, un parto prematuro o un prolapso del cordón umbilical.

La decisión sobre el mejor curso de acción para el tratamiento de la presentación de nalgas se toma en consulta con el médico obstetra y la paciente.

Versión cefálica externa

La versión cefálica externa (VCE) es un procedimiento que se realiza para girar al feto desde una presentación de nalgas a una presentación cefálica. Se realiza generalmente entre las semanas 36 y 37 de gestación, cuando el feto aún tiene espacio para moverse dentro del útero. La VCE se lleva a cabo mediante la aplicación de presión manual sobre el abdomen materno para intentar girar al feto.

La VCE tiene un éxito del 50-70%, y es más probable que tenga éxito en los embarazos de bajo riesgo, como aquellos en los que el feto está en posición de nalgas completa, la madre tiene un útero normal y no hay complicaciones del embarazo. La VCE puede ser un procedimiento doloroso para la madre, y puede llevar a complicaciones como el desprendimiento prematuro de placenta, el prolapso del cordón umbilical, el distrés fetal o la ruptura de membranas.

La VCE es un procedimiento seguro y efectivo cuando se realiza por un médico experimentado, y puede ser una alternativa viable a la cesárea en algunos casos. Sin embargo, es importante tener en cuenta los riesgos y beneficios de la VCE antes de tomar una decisión;

Inducción del trabajo de parto

La inducción del trabajo de parto es una opción para las mujeres con presentación de nalgas que desean un parto vaginal. Se realiza mediante la administración de medicamentos para estimular las contracciones uterinas y acelerar el proceso del parto. La inducción del trabajo de parto puede ser una opción viable para las mujeres con presentación de nalgas que cumplen con ciertos criterios, como un feto de tamaño normal, un útero normal y una pelvis adecuada.

Sin embargo, la inducción del trabajo de parto en presentación de nalgas conlleva riesgos adicionales, como un mayor riesgo de distocia de hombros, prolapso del cordón umbilical, distrés fetal y aspiración de meconio; La decisión de inducir el trabajo de parto en presentación de nalgas debe tomarse cuidadosamente, considerando los riesgos y beneficios para la madre y el feto.

La inducción del trabajo de parto en presentación de nalgas solo debe ser realizada por un médico experimentado en el manejo de partos de nalgas, y en un hospital equipado para manejar cualquier complicación que pueda surgir.

Cesárea

La cesárea es el método de parto más común para las mujeres con presentación de nalgas. Se considera la opción más segura para la madre y el feto, ya que reduce significativamente el riesgo de complicaciones durante el parto vaginal. La cesárea implica una incisión en el abdomen y el útero para extraer al bebé.

La decisión de realizar una cesárea en presentación de nalgas se toma en función de diversos factores, como la edad gestacional del feto, el tamaño y la posición del bebé, la experiencia del médico y las preferencias de la madre. En general, la cesárea se recomienda en casos de presentación de nalgas cuando existe un riesgo elevado de complicaciones durante el parto vaginal.

La cesárea es un procedimiento seguro y eficaz, pero conlleva algunos riesgos, como infección, sangrado excesivo, daño a los órganos internos y recuperación más lenta. Es importante discutir los riesgos y beneficios de la cesárea con el médico antes de tomar una decisión.

Complicaciones de la presentación de nalgas

La presentación de nalgas puede aumentar el riesgo de complicaciones tanto para la madre como para el bebé durante el parto. Estas complicaciones pueden variar en gravedad, desde leves hasta potencialmente mortales. Algunas de las complicaciones más comunes incluyen⁚

• Distocia de hombros⁚ Esta condición ocurre cuando el hombro del bebé se atasca en el canal de parto después de que la cabeza ha salido. Puede ser una situación peligrosa para el bebé, ya que puede causar falta de oxígeno;
• Prolapso del cordón umbilical⁚ El cordón umbilical puede prolapsarse a través del canal de parto antes que la cabeza del bebé, lo que puede comprimir el cordón y reducir el flujo de sangre al feto.
• Distrés fetal⁚ El bebé puede experimentar distrés fetal durante el parto debido a la compresión del cordón umbilical o a la falta de oxígeno.
• Aspiración de meconio⁚ El bebé puede aspirar meconio (heces fecales) durante el parto, lo que puede causar problemas respiratorios.
• Rotura prematura de membranas⁚ Las membranas que rodean al bebé pueden romperse prematuramente, lo que puede aumentar el riesgo de infección.

Es importante tener en cuenta que no todas las mujeres con presentación de nalgas experimentarán complicaciones. Sin embargo, es crucial estar informada sobre los posibles riesgos y discutirlos con el médico para tomar las decisiones más adecuadas para la salud de la madre y el bebé.

Parto vaginal

El parto vaginal en presentación de nalgas es posible en algunos casos, pero conlleva riesgos adicionales. En el pasado, se consideraba que la mayoría de los partos de nalgas debían ser por cesárea. Sin embargo, en los últimos años, se ha producido un cambio hacia el parto vaginal en presentación de nalgas (PVN) en ciertos casos, siempre y cuando se cumplan ciertos criterios y se realice en un centro de salud con experiencia en este tipo de partos.

Los factores que pueden influir en la decisión de intentar un parto vaginal en presentación de nalgas incluyen la edad gestacional del bebé, el peso del bebé, la posición de las nalgas, la experiencia del médico y las preferencias de la madre.

Es crucial que la madre esté informada sobre los riesgos y beneficios del PVN y que se le ofrezca un apoyo adecuado durante el proceso. En caso de que surjan complicaciones durante el parto, se puede optar por una cesárea para garantizar la seguridad de la madre y el bebé.

Distocia de hombros

La distocia de hombros es una complicación grave que puede ocurrir durante el parto vaginal en presentación de nalgas. Se produce cuando el hombro del bebé se atasca en el hueso púbico de la madre después de que la cabeza ha salido. Esto puede provocar una serie de problemas, como daño en el nervio braquial del bebé, asfixia y desgarros vaginales en la madre.

La distocia de hombros es más común en bebés grandes, bebés con presentación de nalgas y madres con pelvis pequeña. Los factores de riesgo incluyen la diabetes gestacional, la obesidad y la edad materna avanzada.

El tratamiento para la distocia de hombros implica una serie de maniobras para liberar el hombro del bebé. Estas maniobras pueden ser difíciles y requieren experiencia y habilidad. En algunos casos, puede ser necesaria una cesárea para liberar al bebé.