Brote de mpox (viruela del mono) se extiende a los Estados Unidos

Estados Unidos ha experimentado un reciente aumento de casos de mpox, una enfermedad viral rara que se ha extendido rápidamente en todo el mundo. El brote actual, que comenzó a principios de 2022, ha planteado preocupaciones de salud pública y ha llevado a esfuerzos intensivos para controlar la propagación de la enfermedad.

Introducción

La mpox, anteriormente conocida como viruela del mono, es una enfermedad viral rara que ha estado presente en África central y occidental durante décadas. Sin embargo, en los últimos meses, ha habido un aumento significativo de casos en todo el mundo, incluido Estados Unidos. Este brote actual ha planteado preocupaciones de salud pública debido a su rápida propagación y su potencial para causar enfermedades graves. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado el brote de mpox como una emergencia de salud pública de interés internacional, destacando la necesidad de una respuesta global coordinada para controlar la propagación de la enfermedad.

Estados Unidos ha experimentado un aumento notable en los casos de mpox desde principios de 2022, con la mayoría de los casos reportados en hombres que tienen relaciones sexuales con hombres. El brote ha planteado desafíos únicos para la salud pública, requiriendo esfuerzos intensivos para la vigilancia, el rastreo de contactos y la educación pública. El objetivo es prevenir la propagación de la enfermedad y proteger la salud de la población en general.

¿Qué es la mpox?

La mpox es una enfermedad viral rara causada por el virus de la mpox, un miembro de la familia de los ortopoxvirus. El virus de la mpox está estrechamente relacionado con el virus de la viruela, que fue erradicado en todo el mundo en 1980. La mpox es una enfermedad zoonótica, lo que significa que se transmite de los animales a los humanos. Los roedores, como las ratas y las ardillas, se consideran los principales reservorios del virus de la mpox en la naturaleza.

La mpox se transmite a los humanos a través del contacto directo con un animal infectado, el contacto con materiales infectados, como ropa de cama o ropa, o a través del contacto con una persona infectada. La transmisión de persona a persona generalmente ocurre a través del contacto cercano con lesiones cutáneas, fluidos corporales infectados o gotas respiratorias.

Un virus antiguo

La mpox es una enfermedad relativamente antigua, con evidencia de su presencia en humanos que se remonta al siglo XX. El primer caso confirmado de mpox en humanos se registró en 1970 en la República Democrática del Congo. Desde entonces, se han reportado casos de mpox en varios países de África central y occidental, donde la enfermedad es endémica. La mpox se ha extendido a otras partes del mundo en los últimos años, lo que ha llevado a preocupaciones de salud pública a nivel mundial.

A pesar de su historia, la mpox no recibió tanta atención hasta el reciente brote global que comenzó en 2022. Este brote ha provocado un aumento significativo en el número de casos de mpox fuera de África, lo que ha llevado a esfuerzos intensivos para comprender la propagación de la enfermedad y desarrollar estrategias efectivas de control.

Un virus zoonótico

El virus de la mpox, también conocido como virus de la viruela del mono, pertenece al género Orthopoxvirus de la familia Poxviridae. Es un virus zoonótico, lo que significa que se transmite de los animales a los humanos. Los animales que se sabe que albergan el virus de la mpox incluyen roedores, primates no humanos (como los monos) y otros mamíferos.

La transmisión de la mpox a los humanos generalmente ocurre a través del contacto directo con animales infectados, como a través de mordeduras, arañazos o el manejo de carne cruda. También es posible contraer la mpox a través del contacto con materiales contaminados, como ropa de cama o ropa, que han estado en contacto con un animal infectado.

Transmisión de persona a persona

Si bien la mpox se transmite principalmente de animales a humanos, también puede propagarse de persona a persona a través del contacto cercano. Este tipo de transmisión puede ocurrir a través del contacto directo con lesiones cutáneas, fluidos corporales (como saliva, sangre o líquido de las lesiones), o con objetos contaminados con el virus.

La transmisión de persona a persona puede ocurrir a través de⁚

• Contacto directo con lesiones cutáneas de una persona infectada.
• Contacto con fluidos corporales de una persona infectada.
• Contacto con objetos contaminados con el virus, como ropa de cama o ropa.
• Gotas respiratorias, pero esto es menos común que la transmisión por contacto directo.

El período de incubación de la mpox, es decir, el tiempo que transcurre entre la exposición al virus y el inicio de los síntomas, suele ser de 6 a 13 días, pero puede variar de 5 a 21 días.

Síntomas de la mpox

Los síntomas de la mpox suelen aparecer entre 5 y 21 días después de la exposición al virus; La enfermedad se desarrolla generalmente en dos fases⁚ una fase prodrómica seguida de una erupción cutánea.

La fase prodrómica, que puede durar de 1 a 5 días, se caracteriza por síntomas como⁚

• Fiebre
• Dolor de cabeza
• Dolor muscular
• Dolor de espalda
• Ganglios linfáticos inflamados
• Fatiga
• Escalofríos
• Dolor de garganta
• Tos

La erupción cutánea suele aparecer entre 1 y 3 días después de la fiebre.

Fase prodrómica

La fase prodrómica de la mpox se caracteriza por un conjunto de síntomas que preceden a la erupción cutánea característica de la enfermedad. Estos síntomas suelen aparecer entre 1 y 5 días antes del desarrollo de la erupción, y pueden ser bastante inespecíficos, lo que dificulta el diagnóstico temprano.

Los síntomas más comunes de la fase prodrómica incluyen⁚

• Fiebre⁚ Un aumento de la temperatura corporal por encima de los 38.5 grados Celsius es un síntoma frecuente.
• Dolor de cabeza⁚ Un dolor de cabeza intenso y generalizado es otro síntoma común.
• Dolor muscular⁚ Los músculos pueden sentirse doloridos y débiles.
• Dolor de espalda⁚ Un dolor de espalda intenso, especialmente en la zona lumbar, puede ser un síntoma de la fase prodrómica.
• Ganglios linfáticos inflamados⁚ Los ganglios linfáticos, especialmente los del cuello, las axilas o la ingle, pueden estar inflamados y dolorosos.
• Fatiga⁚ Sensación de cansancio y debilidad generalizada.
• Escalofríos⁚ Sensación de frío, incluso con una temperatura corporal elevada.
• Dolor de garganta⁚ La garganta puede estar irritada y dolorida.
• Tos⁚ Una tos seca o productiva puede estar presente.

Es importante destacar que no todos los individuos experimentarán todos estos síntomas, y algunos pueden presentar síntomas más leves o incluso ningún síntoma.

Erupción cutánea

La erupción cutánea es la característica más distintiva de la mpox y suele aparecer entre 1 y 3 días después del inicio de los síntomas prodrómicos. Comienza como pequeñas manchas rojas que se convierten en pápulas, luego vesículas llenas de líquido y finalmente pústulas. Estas lesiones suelen ser dolorosas y pueden causar picazón.

La erupción cutánea de la mpox tiene varias características que la distinguen de otras enfermedades eruptivas⁚

• Localización⁚ La erupción suele aparecer primero en la cara, las palmas de las manos, las plantas de los pies y la boca, pero puede extenderse a otras partes del cuerpo.
• Evolución⁚ Las lesiones pasan por diferentes etapas, desde manchas rojas hasta pústulas que se secan y forman costras.
• Distribución⁚ Las lesiones suelen ser numerosas y pueden estar agrupadas o dispersas.
• Morfología⁚ Las lesiones pueden ser maculopapulares, vesiculares o pustulares, y pueden tener un aspecto similar a granos de acné o a viruela.

La erupción cutánea de la mpox suele durar de 2 a 4 semanas y puede dejar cicatrices, especialmente si se rasca o se infecta.

Diagnóstico y tratamiento

El diagnóstico de la mpox se basa en la evaluación clínica de los síntomas, el historial de exposición y la confirmación de laboratorio. La confirmación de laboratorio suele implicar la toma de muestras de las lesiones cutáneas para su análisis mediante PCR (reacción en cadena de la polimerasa) o microscopía electrónica.

El tratamiento de la mpox se centra en aliviar los síntomas y prevenir complicaciones. No existe un tratamiento antiviral específico para la mpox, pero se pueden usar analgésicos para controlar el dolor y la fiebre, y antibióticos para prevenir infecciones bacterianas secundarias.

La mayoría de las personas con mpox se recuperan sin complicaciones, pero las personas con sistemas inmunitarios debilitados o con otras afecciones médicas pueden tener un mayor riesgo de complicaciones graves. En algunos casos, la mpox puede causar encefalitis, neumonía o sepsis.

Diagnóstico

El diagnóstico de la mpox se basa en una combinación de evaluación clínica, historial de exposición y confirmación de laboratorio. Los profesionales de la salud deben considerar la posibilidad de mpox en cualquier persona que presente una erupción cutánea característica, especialmente si ha viajado a áreas donde la enfermedad es endémica o ha estado en contacto con personas o animales infectados.

La evaluación clínica implica un examen físico para identificar la erupción cutánea, así como la evaluación de otros síntomas como fiebre, dolor de cabeza, fatiga y ganglios linfáticos inflamados. El historial de exposición incluye preguntas sobre viajes recientes, contacto con personas o animales infectados, y cualquier posible exposición a la enfermedad.

La confirmación de laboratorio es esencial para un diagnóstico definitivo. Esto implica la toma de muestras de las lesiones cutáneas para su análisis mediante PCR (reacción en cadena de la polimerasa) o microscopía electrónica. La PCR es una técnica altamente sensible y específica que puede detectar el ADN del virus mpox en las muestras. La microscopía electrónica permite la visualización de las partículas virales, proporcionando evidencia adicional de infección.

Tratamiento

El tratamiento de la mpox se centra en aliviar los síntomas y prevenir complicaciones. No existe un tratamiento específico para la infección por el virus mpox, pero los antivirales pueden ayudar a controlar la enfermedad y reducir la gravedad de los síntomas.

El antiviral tecovirimat (TPOXX) ha demostrado eficacia en el tratamiento de la viruela y se ha utilizado con éxito para tratar casos de mpox. El tecovirimat es un inhibidor de la ADN polimerasa viral que bloquea la replicación del virus. Otros antivirales, como el cidofovir y el brincidofovir, también pueden ser efectivos en el tratamiento de la mpox, pero su uso está limitado debido a la toxicidad potencial.

El tratamiento de apoyo implica el alivio de los síntomas como la fiebre, el dolor y la picazón. Los analgésicos de venta libre, como el paracetamol o el ibuprofeno, pueden ayudar a controlar el dolor y la fiebre. Los antihistamínicos pueden reducir la picazón y la inflamación. La hidratación adecuada también es importante para prevenir la deshidratación.

Prevención de la mpox

La prevención de la mpox es esencial para controlar la propagación de la enfermedad. Las medidas de prevención incluyen la vacunación, las medidas de salud pública y la reducción del riesgo de exposición al virus.

La vacunación es la forma más efectiva de prevenir la mpox. La vacuna contra la viruela, que también ofrece protección contra la mpox, se ha utilizado durante décadas para controlar la viruela. Sin embargo, la vacuna contra la viruela ya no se administra de forma rutinaria en muchos países.

Las medidas de salud pública, como el aislamiento de los casos confirmados y los contactos cercanos, son cruciales para evitar la propagación de la mpox. El lavado frecuente de manos, el uso de mascarillas y el mantenimiento de una buena higiene son medidas importantes para prevenir la transmisión del virus.

La reducción del riesgo de exposición al virus mpox implica evitar el contacto con personas infectadas, animales infectados y materiales contaminados. Los viajeros deben estar al tanto de los riesgos de mpox en sus destinos y tomar precauciones para evitar la exposición.

Vacunación

La vacunación es un componente fundamental en la estrategia de prevención de la mpox. La vacuna contra la viruela, que también ofrece protección contra la mpox, ha demostrado ser eficaz en la prevención de la enfermedad. La vacuna contra la viruela, conocida como ACAM2000, está disponible en los Estados Unidos y se administra por vía intradérmica.

La vacuna contra la viruela se recomienda para personas con alto riesgo de exposición a la mpox, como trabajadores de la salud, personal de laboratorio y personas que viajan a áreas donde la mpox es endémica; También se recomienda para personas que han estado en contacto cercano con una persona infectada con mpox.

La vacunación contra la viruela puede proporcionar inmunidad a la mpox durante varios años. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la vacuna contra la viruela puede tener efectos secundarios, como dolor en el lugar de la inyección, fiebre y dolor de cabeza. Es crucial consultar a un profesional de la salud para determinar si la vacunación contra la viruela es adecuada para usted.

Medidas de salud pública

Las medidas de salud pública desempeñan un papel crucial en la contención y mitigación de los brotes de mpox. Estas medidas se centran en identificar y aislar a los casos confirmados, rastrear los contactos cercanos y brindar atención médica a los pacientes infectados.

Los esfuerzos de salud pública incluyen la vigilancia activa de casos sospechosos, la detección temprana y el aislamiento de pacientes con mpox. El rastreo de contactos implica identificar a las personas que han estado en contacto cercano con un caso confirmado y brindarles asesoramiento y seguimiento.

La educación pública es fundamental para aumentar la conciencia sobre la mpox, sus síntomas y las medidas preventivas. Esto incluye la promoción de prácticas de higiene adecuadas, como el lavado frecuente de manos y el uso de guantes al manipular animales o personas infectadas. La colaboración entre las agencias de salud pública, los profesionales de la salud y la comunidad es esencial para controlar y prevenir la propagación de la mpox.

Brote actual

El brote actual de mpox, que comenzó a principios de 2022, se ha extendido rápidamente a nivel mundial, incluyendo Estados Unidos. Este brote se caracteriza por su propagación inusual, con casos reportados en países donde la enfermedad no era previamente endémica.

La rápida propagación del virus ha generado preocupación por la salud pública, especialmente en países con sistemas de salud débiles o limitados recursos para hacer frente a un brote de esta naturaleza.

Los esfuerzos internacionales para contener la propagación de la mpox incluyen la vigilancia activa de casos, el rastreo de contactos, la vacunación y el desarrollo de tratamientos antivirales. La Organización Mundial de la Salud (OMS) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) están trabajando en estrecha colaboración para coordinar la respuesta global a este brote.